Según la UCI, “un estudio reciente sobre la posición de los
corredores en las disciplinas de carretera y pista ha puesto de manifiesto que
el Reglamento, que data de 2000, no se corresponde ya de forma completa a la
realidad observada, con una media de los corredores cercana al 80% que solicitan
sistemáticamente una derogación por causas morfológicas antes de la salida de
las pruebas”.
Con esta reforma, la UCI pretende “que no se deje nada a
la interpretación y que las reglas se apliquen de forma uniforme a lo largo de
toda la temporada”. En concreto, el corredor podrá elegir una de las dos
derogaciones por causas morfológicas, pero nunca las dos: o bien el adelanto del
pico del sillín hasta la vertical que pase por el eje del pedalier o el avance
de los prolongadores hasta 80 centímetros en relación al eje del pedalier.
Así pues, no serán necesarios ya los test morfológicos, ni para el
avance del pico del sillín (test de la rodilla) ni para el avance de los
prolongadores (test del ángulo entre los brazos). Igualmente se añaden al
reglamento dos precisiones en relación con la posición adoptada. Por un lado,
todos los tipos de manetas serán medidas hasta su extremo; por otro, la
diferencia de altura entre en punto de apoyo del codo y el punto más alto y el
más bajo de los prolongadores (comprendidas las manetas) deberá ser inferior a
10 centímetros para garantizas la posición de los antebrazos en un plano
horizontal.
Todo esto significa que solamente se controlará la
bicicleta, sin que se solicite la presencia del corredor para no molestarle en
su preparación antes de la carrera. La UCI destaca igualmente que con ello se
evita el riesgo de descalificación de los corredores por adoptar una posición no
reglamentaria durante su esfuerzo. Los artículos afectados pueden consultarse
–en su versión inglesa o francesa-
en este documento, recordando que la aplicación de las
normas durante la temporada 2013 será idéntica a la de 2012.
Cortesía
RFEC.
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